Realmente nos da igual hablar de chocolate con leche o chocolate puro, ¡Los dos son deliciosos! Pero hay que reconocer que no a todo el mundo le gustan las dos variantes de este dulce tan rico.
El chocolate es un clásico en todas las casas, un producto protagonista de nuestros postres, meriendas, almuerzos, viajes, recreos, cumpleaños, tardes de cine, el chocolate se relaciona con momentos especiales.
En el caso del chocolate puro o negro, también conocido como chocolate amargo, viene precisamente de la cantidad de cacao que contenga la mezcla.
Para que un chocolate se considere puro, el porcentaje mínimo de cacao de la mezcla debe ser del 50%. Por supuesto, a mayor proporción de cacao, más amargo será el chocolate.
El chocolate negro (llamado también chocolate fondant, amargo, bitter, amer, duro) es el chocolate propiamente dicho, pues es el resultado de la mezcla de la pasta y manteca de cacao con azúcar. Digamos que es la máxima pureza dentro de los chocolates que consumimos habitualmente y el que tiene un sabor más fuerte.
Cuando hablamos de chocolate con leche, tiene un porcentaje de cacao mucho menor que el chocolate negro. Y además, tiene más azúcar, por eso es tan dulce, lleva un ingrediente añadido, la leche en polvo.
Chocolate con leche
Un ejemplo son nuestros abanicos de chocolate con leche, cuyos ingredientes son: Cobertura de chocolate con leche (azúcar, manteca de cacao, leche entera en polvo, pasta de cacao, emulgente (lecitina de soja), aroma natural de vainilla), harina de trigo, azúcar, aceite vegetal (coco), leche descremada en polvo, emulgente E-322 (lecitina de soja), harina de malta, colorante E-150d (caramelo), gasificante E-500 (bicarbonato sódico), sal, aroma.
El chocolate con leche es el derivado del cacao en el que la proporción de pasta de cacao suele estar por debajo del 40%, en nuestro caso al 47%. No obstante, buena parte de las más importantes marcas de chocolate producen tabletas de chocolate con leche con proporciones de cacao inusuales, por encima incluso del 50 %, dirigidas tanto al mercado de los gourmets como al negocio de la pastelería. El chocolate con leche, como su nombre indica, lleva leche añadida, en polvo o condensada.
En Galletas Polen utilizamos una cobertura de chocolate puro, la cual realizamos nosotros mismos. Así obtenemos el sabor POLEN.