La comida en vacaciones es uno de los problemas que nos encontramos a la vuelta de las mismas, ¡Ahora qué hago yo con estos kilos de más!
El quebradero de cabeza de: ¿Cómo lo hago para llevar una alimentación equilibrada y a la vez disfrutar de la gastronomía del destino donde me encuentro de vacaciones?
Las vacaciones son esos días en los que nos olvidamos del trabajo, la pandemia y los problemas, ¡Solo vale disfrutar y desconectar!
Muchos de nosotros después de incluso más de un año sin descansar, vamos a poder disfrutar de esos días en los que el descanso, las comidas fuera de casa y el turismo, son los protagonistas.
Dejando claro que nos lo merecemos y tenemos que aprovechar al máximo este kit kat de la rutina diaria, vamos a darte unos tips para no bajar la guardia en tus días de break laboral.
Comida en vacaciones
¿Qué podemos llevar a la playa o a la excursión por la montaña durante nuestras vacaciones? No todo vale, lo primero por qué tienen que ser alimentos que se conserven bien durante el trayecto, e incluso que mantengan su calidad dentro de una nevera en la playa por ejemplo.
Como sugerencia aquí dejamos nuestros TOP 10:
- La fruta siempre es una apuesta segura.
- Empanada, tanto casera o comprada, con atún, tomate, vegetal, son buenas combinaciones.
- Ensalada fría de pasta o arroz, si la mezclamos con tomate, atún, jamón York, aguacate… ¡Podemos hacer un platazo para cargar pilas!
- El clásico bocadillo siempre funciona, pan del día y embutido, es caballo ganador.
- Dependiendo de la temperatura y el tiempo que este en la nevera por llevar huevo, la tortilla francesa o de patata, con pan con tomate, ¡Está riquísimo!
- Snacks y/0 barritas energéticas, nos vendrán de maravilla para picar o incluso de postre.
- Sandwich vegetal, tomate, lechuga, atún y huevo, una comida fresca y llena de nutrientes.
+ Incluye siempre bebida, preferiblemente agua o zumos, recordamos siempre la importancia de mantenerse hidratado, y aún más en verano con temperaturas elevadas y encima haciendo excursiones, viajes, etc…
Cómo has podido observar son comidas fáciles, rápidas de preparar y sin mucha carga de grasas ni pesadas. Alimentos ricos en nutrientes y que nos ayudarán a hacer una digestión rápida.
Elige comidas ligeras y nutritivas que puedan conservarse varias horas en neveras o bolsas térmicas, cuida tu dieta en vacaciones y así la recuperación a la vuelta será menos dura.