Detectar el estrés es algo que te puede ayudar a tomar medidas en un día a día antes de que se convierta en una crisis de ansiedad.
Como bien sabemos el estrés en cierto modo es bueno, ya que nos mantiene activos, alerta y hace que vayamos más rápido en nuestro día a día.
Pero, el estrés también puede provocar el efecto contrario, distracción, olvidarse de alguna de las mil cosas que queremos hacer en un mismo día, e incluso hacerlo mal por no estar centrados.
¿Cómo detectar el estrés?
Sacar la conclusión de: es que soy así y no puedo ir más despacio, o me encanta ir estresad@, etc… No es la solución ni tiene que ser un consuelo.
Si vamos como una moto por la vida, con las respiración acelerada, no descansamos por las noches (descansar no es lo mismo que dormir), hacemos que se tensen nuestros músculos y aumentamos la presión arterial, esto será una bomba de relojería.
No pienses que no hay límites, que tu resistencia es inhumana y que puedes con todo, aunque no lo creas si un día tu cuerpo o mente dice basta… Te costará recuperarte.
Un brote de ansiedad, una situación en la que nuestro cuerpo por ejemplo no puede más, hará que todo se desmorone, y por lo tanto tendremos que desde cero volver a recuperarnos.
Toma medidas antes de que sea tarde, organiza tu día a día pensando en que no estas sol@ y delegar es clave para no llegar a tu límite.
Además, llega la navidad, así que vez de estresarte aprovecha a descansar, a disfrutar de los tuyos y a vivir momentos inolvidables.