La obesidad infantil se ha convertido en un problema de actualidad, por la cantidad de niñ@s que se encuentran por encima del peso del que deberían, muchas veces hay una parte genética pero la base se encuentra en nuestra alimentación.
La herencia genética es clara, y desde pequeño estamos marcados por esa genética familiar en distintos aspectos de nuestro cuerpo, pero todo ello se puede controlar con unos buenos hábitos alimenticios que ayuden a no perder de vista nuestro peso ideal.
Hoy en día la cantidad de alimentos a nuestra disposición es algo positivo, pero si no somos conscientes de lo que comemos y dejamos todo libremente a la improvisación, seguro que no comemos de forma adecuada.
Obesidad infantil
El sobrepeso en un niño puede condicionar su vida en muchos aspectos, principalmente los físicos ya que con esos kilos de más no podremos desempeñar muchas actividades que otros niñ@s con el peso adecuado si que lo harán. Esto conlleva a que afecte psicológicamente al pequeño, en ocasiones no podrá hacer lo mismo que los demás y se sentirá apartado.
Todo viene condicionado por lo que comemos y la actividad física que realizamos, con una vida sendentaria desde pequeños, acostumbramos a nuestro cuerpo a unos ritmos que dificultarán mucho la quema de grasas y otros alimentos pesados.
Además es lógico que los niños obesos tendrán más probabilidades de seguir siendo obesos en la edad adulta. Todo reside en unos hábitos saludables que llevaremos a lo largo de nuestra vida y que empiezan desde que somos pequeños.
Costumbres alimenticias y un ritmo de vida saludable que facilite que nuestro cuerpo sea capaz de administrar bien los recursos que necesita, y desechar los que no a través del ejercicio y un buen descanso.
La obesidad puede conllevar problemas a largo plazo: metabólicos, hormonales, respiratorios, emocionales, ortopédicos, cardiovasculares, gastrointestinales… ¡Realmente merece la pena ponerle freno!
Recuerda, nuestro cuerpo tiene memoria y todo lo que vayamos cargando sobre nuestro cuerpo, bien sea en kilos de más, esfuerzos extremos, vida sedentaria… Hará que a largo plazo lo paguemos.
¡Empieza hoy con los hábitos saludables en casa!
