Seguro que más de una vez recuerdas esa receta especial de galletas, ese sabor tradicional que sabe a infancia y que nos teletransportan a ese olor a recién hecho… Esas galletas sacan nuestro lado Peter Pan.
Todos sabemos que la galleta es un producto que podemos consumir como dulce o salado, normalmente horneado a base de harina, huevos, azúcar, y/o mantequilla, aceite, etc… ¡Cada uno tiene su receta especial! Hay galletas de todo tipo, con chocolate, coco, vainilla, nata, frutos secos… Y después la puedes mezclar con aún más ingredientes, como helado, flan, tartas, ¡Permite cientos de variaciones!
Por ello hoy dese Galletas Polen queremos recordar la importancia del sabor 100% artesano, un sabor que nos recuerda que las recetas de toda la vida perduran generación tras generación.
¡Me recuerdan a mi abuel@! Para nosotros es una satisfacción que cuando coméis productos de la tienda de galletas, empecéis un viaje en el tiempo hasta vuestra infancia.
Receta especial de galletas
¿Cómo se consiguen estas galletas? Con mucho mimo y cuidado, con procesos de elaboración tradicionales y materias primas de primera calidad, controlando cada etapa de la galleta y produciendo exclusivamente sobre pedido.
El sabor puro y tradicional se consigue paso a paso, cuidando cada fase de cada producto, desde Galletas Polen tenemos claro que esa es la clave para seguir fabricando después de 3 generaciones.
En un contexto a nivel mundial en el que tenemos que apostar por el consumo local, consumo de proximidad en las tiendas de nuestros barrios, en los fabricantes españoles, aprovechando nuestros propios recursos para salir adelante y llevar a cualquier lugar del mundo la marca España.
Sabor puro en cada galleta, esto es lo importante, cada caja de galletas Polen lleva su sello de calidad y el esfuerzo de un equipo dedicado a conseguir la excelencia en cada snack.
Desde la fabrica hasta tu casa, los cambios en los hábitos de consumo hacen que artesanos y cliente final estemos más conectados que nunca, y hoy en día llevar nuestras cajas de galletas hasta la puerta de vuestras casas es una realidad que nos hace mucha ilusión.
Nos hace volver a los comienzos, cuando directamente nuestro abuelo hacía galletas para la gente del barrio, la gente de la ciudad, la gente que apuesta por el sabor puro.
